Los accidentes con lentes de contacto pueden afectar la visión de forma temporal o permanente. La visión es uno de los sentidos más sensibles, por lo cual se requiere un cuidado adecuado en casos de emergencia.
Cuidar la visión es una tarea que implica mucha atención y detalle, pues se trata de un sentido vital muy sensible. Nadie está exento de sufrir en algún momento de la vida algún incidente que afecte los ojos, bien sea por golpes, infecciones o contacto con sustancias tóxicas u objetos extraños.
Uno de los problemas que pueden afectar con frecuencia la salud visual es el uso inadecuado de lentes de contacto o tenerlas puestas al momento de una caída, golpe o accidente. Es esencial saber cómo reaccionar para evitar que un episodio pueda tener consecuencias severas.
Pedir ayuda profesional
Contar con un seguro de accidentes facilita la atención de emergencias tanto menores como mayores, es un alivio, ya que no hay de qué preocuparse si no se tiene liquidez al momento, pero lo primero es determinar el tipo de lesión sufrida. En el caso, por ejemplo, que entre alguna partícula extraña en el ojo, puede bastar con lavarlo suavemente con agua; no obstante, si se recibe un golpe y una lentilla se rompe cuando está colocada, es necesario acudir al médico.
Para todo golpe de consideración, rasgaduras o roturas que incluyan el globo ocular es imperativo buscar asistencia rápida. Los traumatismos por accidente ocular se ubican entre las causas principales de ceguera, por lo que cualquier incidente de este tipo debe tomarse con seriedad. Si están involucrados cristales de lentes o lentillas en el suceso mucho más.
Cuando hay lesión ocular se recomienda colocar compresas frías con la intención de reducir la hinchazón y controlar alguna hemorragia. En ningún caso debe aplicarse presión.
Trasladarse de inmediato al médico
Contar con un seguro que incluya servicio de ambulancias para traslados facilita la atención de este tipo de contingencia sin correr riesgo. No se aconseja frotar o presionar un ojo lastimado. Tampoco debe retirarse el lente a menos que exista un problema de hinchazón rápida.
No es prudente extraer cuerpos extraños que estén incrustados en alguna zona del ojo, en este caso la acción debe ser ejecutada por un médico. Tampoco deben aplicarse pinzas, algodones o algún objeto dentro del ojo, porque puede causar más daño.
Algunos traumatismos pueden ser perforantes o no perforantes. En el caso de ser una abrasión superficial córnea, esta puede ser dolorosa, aunque no grave, y bien tratada se cura en lapso entre un día o dos, no obstante, si afecta al centro de la córnea podría traer consecuencias graves.
Algunas veces el golpe no se recibe en el ojo de forma directa, sin embargo, se puede ver afectado indirectamente, también puede generarse una hifema o hemorragia intraocular que puede causar que la tensión interna del ojo se dispare.
Las lesiones que incluyen perforación ocular son muy delicadas, y necesitan la consulta oftalmológica inmediata. Podría incluso necesitar cirugía.
Las emergencias oftalmológicas también pueden presentarse en caso de quemaduras, contacto con sustancia química o golpe con un objeto externo. En ninguno de estos casos se debe frotar el ojo, lo conveniente es lavarse el área con agua en abundancia y taparlo con una gasa estéril. No se aplique gotas oftálmicas o colirios.
Utilizar lentes de contacto puede generar complicaciones si no se cumplen las normas de limpieza, incluso pueden causar infecciones. Sean lentes de contacto para mejorar la visión o por estética, igual debe ser tratada de manera responsable para no afectar la visión. Si se ve alguna irregularidad como irritación o enrojecimiento, también debe acudir al oftalmólogo.Las infecciones pueden manifestarse con úlceras en el área periférica de la córnea. Se trata de una reacción a toxinas bacterianas que colonizan las lentes de contacto, cuando se utilizan de forma prolongada, sobre todo de noche. Aunque no es frecuente, se trata de una emergencia médica que debe ser tratada, para evitar situaciones más graves. Si se detecta debe suspender momentáneamente el uso de las lentillas y acudir al especialista para que coloque un tratamiento adecuado.
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