Lentillas cosméticas

Puede que para cualquier usuario habitual de lentes de contacto el uso de las lentillas cosméticas y las lentillas de colores implique acudir a una óptica, sin embargo muchas personas que desconocen los riesgos de usar lentillas sucias o inapropiadas se atreven a comprar lentillas cosméticas y de colores en mercadillos, bazares, y tiendas de disfraces.

Obviamente son productos más baratos, pero que no cumplen los requisitos sanitarios, de modo que pueden dar lugar a problemas como la falta de oxigenación de la córnea, reacciones alérgicas, e incluso úlceras corneales debido a la presencia de gérmenes o a su incorrecta manipulación.

Las lentillas cosméticas son aquellas que empleamos para cambiar la apariencia de nuestros ojos, por ejemplo para darles una apariencia felina, de vampiro, de zombie, o cualquier otra como las que vemos en la imagen de arriba.

Las lentillas cosméticas no son lentes correctoras, lo que lleva a pensar a muchas personas que se pueden usar como cualquier otro complemento de disfraz, lo que les anima a comprar lentillas cosméticas a través de Internet o en cualquier bazar que tengan cerca de casa.

Esto puede ser un grave error que de lugar a los problemas visuales que hemos mencionado antes, para evitarlo lo que debemos hacer es comprar lentillas cosméticas en ópticas donde un especialista pueda adaptar el producto a nuestros ojos, ya que no todo el mundo puede usar lentillas, y las lentillas cosméticas, aún sin ser correctoras, deben cumplir los mismos requisitos y parámetros que las lentes correctoras.

Uso de lentillas de colores y cosméticas

A la hora de usar lentillas de colores y cosméticas es recomendable lavarse y secarse bien las manos antes de ponerlas y quitarlas. También debemos mantenerlas limpias empleando soluciones de limpieza y mantenimiento prescritas por el óptico-optometrista y conservarlas en un portalentes.

Tampoco debemos usar las lentes de contacto más tiempo de lo recomendado, ni más allá de la fecha de caducidad, ni dormir con ellas.

Al igual que no debemos comprar gafas de sol en los mercadillos, tampoco deberíamos comprar lentillas de colores y cosméticas en bazares, mercadillos u otros establecimientos no autorizados pues no están sujetas a ningún tipo de control o medida de seguridad.